En Bolivia, las mujeres lideran negocios sostenibles y generan un impacto social en sus comunidades. Un ejemplo es Rita La Fuente, de 57 años, fundadora de Biotika, una microempresa de cosmética natural en Santa Cruz. Sus productos, elaborados con ingredientes como romero, asaí y cebolla, combinan tradición e innovación y ofrecen alternativas ecológicas y de calidad.
La pandemia de 2020 afectó su economía, pero no su determinación para surgir. Aprovechando su formación en química, transformó su pasión en un negocio próspero. Hoy, a través del proyecto Fortalecimiento de Unidades Productivas Lideradas por Mujeres, financiado por KOICA y ejecutado por ONU Mujeres, su producción pasó de 300 a 3.000 botellas de champú al mes, expandiendo sus ventas a más de 30 tiendas en Cochabamba y Santa Cruz. Además, generó empleos para más de 30 mujeres jóvenes en su localidad, contribuyendo a su autonomía económica.
Entre 2023 y 2024, el proyecto ha beneficiado a 130 mujeres como Rita, quienes recibieron herramientas para fortalecer sus negocios. Asimismo, se entregaron 86 equipos a asociaciones de productoras y centros educativos con alta presencia femenina.
Más de 4.000 mujeres han fortalecido sus capacidades en gestión empresarial y habilidades técnicas, como parte del esfuerzo para cerrar las brechas de género y promover la igualdad.