En el segundo año de implementación del Marco de Complementariedad de las Naciones Unidas para el Vivir Bien 2023-2027, se destacó el compromiso, la coherencia, eficacia y eficiencia del Equipo de País, a través de intervenciones estratégicas y articuladas entre las 18 agencias, fondos y programas con presencia en Bolivia, en coordinación con el Estado, socios y contrapartes.
ONU Bolivia consolidó espacios y mecanismos de colaboración interagencial mediante el funcionamiento de grupos de resultados programáticos y equipos especializados en áreas clave para el país, impulsando una nueva generación de equipos que actúan con una sola voz.
III Foro de Cooperación Trinacional del Gran Chaco Americano
El III Foro Trinacional, entre Argentina, Bolivia y Paraguay, realizado en noviembre de 2024 en Santa Cruz de la Sierra, subrayó la cooperación transfronteriza como esencial para enfrentar los desafíos comunes y avanzar hacia un desarrollo sostenible inclusivo en el Gran Chaco Americano.
Se destacó la necesidad de integrar activamente a las comunidades indígenas y mujeres en la toma de decisiones y ejecución de proyectos, asegurando una territorialización de acciones respaldada por datos precisos que facilite una planificación efectiva.
Además, se enfatizó la importancia de la colaboración continua entre actores locales e internacionales para garantizar el éxito en la implementación de medidas que impulsen el desarrollo sostenible en la región.
Durante el evento, se promovió el intercambio de experiencias sobre la preparación de los Informes Locales Voluntarios (ILV), con el fin de fortalecer capacidades en planificación y presupuestación basadas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y explorar soluciones transfronterizas frente a vulnerabilidades del cambio climático.
El Foro culminó con la adopción de la Declaración de Intención para la Creación de la Red Trinacional del Gran Chaco y un Manifiesto de los Pueblos Indígenas del Gran Chaco, abriendo un espacio para el seguimiento de los primeros ILV de autonomías indígenas y la colaboración entre los gobiernos locales de la región, para garantizar una acción más coordinada y efectiva.
Este trabajo conjunto entre las Oficinas de Coordinación Residente de Argentina, Bolivia y Paraguay y el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales (DESA) involucró la participación de varias agencias, fondos y programas de las Naciones Unidas de los tres países y representó una oportunidad invaluable de acelerar la implementación de la Agenda 2030 con autoridades municipales y sociedad civil de la región del Chaco.
Promoviendo casi un centenar de acciones humanitarias
Tras los incendios forestales y gracias a una rápida activación, el Equipo Humanitario País, bajo el liderazgo de la Coordinadora Residente/Humanitaria, llevó a cabo una evaluación rápida de necesidades y daños en coordinación con el Viceministerio de Defensa Civil (VIDECI). Para ello, se utilizó una herramienta multisectorial desarrollada colectivamente, con el objetivo de mejorar la disponibilidad de información.
Cuatro equipos multidisciplinarios e interinstitucionales, integrados por 11 miembros, recorrieron simultáneamente 39 comunidades en siete municipios del oriente boliviano. Las áreas evaluadas fueron definidas en coordinación con las autoridades nacionales y locales, priorizando las comunidades más vulnerables, como las poblaciones indígenas y campesinas.
Los resultados de la evaluación permitieron establecer un diagnóstico común sobre la afectación y facilitar una respuesta eficiente, coordinada y basada en evidencia. A partir de este análisis, el Equipo Humanitario País ejecutó más de 95 intervenciones para atender las necesidades de 17.400 familias en 40 municipios.
OIM, UNICEF y ACNUR trabajaron en el municipio de San Matías, en Santa Cruz, donde cerca del 47% del territorio fue devastado por el fuego. Se desarrolló una misión conjunta de las Naciones Unidas a ocho comunidades y se distribuyeron artículos esenciales como agua potable, kits de higiene, purificadores de agua, mochilas escolares y alimentos a más de 600 familias.
Primera evaluación de accesibilidad para la inclusión
En el marco del Plan de Trabajo para la Inclusión de la Discapacidad 2024 y en alineación con la Estrategia de las Naciones Unidas para la Inclusión de la Discapacidad (UNDIS), ONU Bolivia realizó la primera evaluación de accesibilidad en siete instalaciones, en la ciudad de La Paz. Esta iniciativa, coordinada por el Grupo de Administración del OMT y el Task Force para la Inclusión de la Discapacidad, tuvo como objetivo evaluar la accesibilidad de las instalaciones de forma integral, amplia y participativa, identificando barreras físicas y digitales en los espacios de trabajo y proponiendo mejoras concretas para garantizar la plena inclusión de las personas con discapacidad.
El ejercicio se llevó a cabo de manera participativa: las agencias, fondos y programas con presencia en el país participaron a través del apoyo de 49 colegas, 14 personas con diferentes tipos de discapacidad, dos intérpretes de lenguaje de señas y un transcriptor para personas con discapacidad auditiva. Se evaluaron los espacios aplicando herramientas basadas en normativa nacional e internacional. Además del acceso físico a oficinas y áreas comunes, se analizó la accesibilidad en reuniones virtuales y sistemas de comunicación.
Los hallazgos de esta evaluación servirán para implementar mejoras concretas en infraestructura y procesos de trabajo, fortaleciendo el compromiso de ONU Bolivia con la accesibilidad y la equidad en el acceso a sus espacios y servicios para todas las personas. Se prevé que en 2025 y 2026 se implementen las recomendaciones del informe. La segunda evaluación se realizará en 2027 y su objetivo será que todas las instalaciones alcancen el nivel uno de accesibilidad.
Hacia el empoderamiento de las juventudes
El Grupo Interagencial de Juventudes (GIJ) de ONU Bolivia continuó su esfuerzo por promover la participación efectiva de las juventudes. Se realizaron talleres de fortalecimiento de capacidades para los puntos focales de las agencias, lo que permitió una mejor implementación del enfoque juvenil en políticas y programas.
Además, se sistematizó una guía especializada que orienta las intervenciones de ONU Bolivia, asegurando un enfoque coherente y participativo. El GIJ también completó con éxito el ejercicio de relevamiento de datos para el Cuadro de Indicadores de Desempeño del Equipo País, proporcionando una base sólida para evaluar el progreso en la aplicación de la Estrategia Juventud 2030.
Con una meta alcanzada del 50% de los indicadores, este logro subraya la importancia del enfoque interagencial, reflejando un avance significativo en la inclusión de las juventudes. Además, el trabajo con el Gobierno de Bolivia y otros actores clave permitió fortalecer las inversiones en soluciones impulsadas por jóvenes e integrar componentes de la estrategia en diversas campañas comunicacionales.
Esta colaboración también facilitó la vinculación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), asegurando que las políticas públicas estén alineadas con las necesidades de la juventud y los compromisos globales. Estos esfuerzos consolidan el camino hacia un futuro más inclusivo para las juventudes en Bolivia.
En 2024, gracias al esfuerzo colectivo, se logró un ahorro total de 618.372 dólares, superando en un 249,93% la evitación de costos registrada en 2023. Este importante hito reafirma el valor del trabajo interagencial, especialmente a través del OMT, que ha demostrado ser un equipo sólido y cohesionado, a pesar de las distintas perspectivas y mandatos institucionales.
Se realizaron, además, actividades relevantes para las agendas normativas, como la primera Evaluación de Accesibilidad de Instalaciones de ONU Bolivia, sin incurrir en costos adicionales, la capacitación a proveedores sobre la Política de Protección contra la Explotación y el Abuso Sexual (PEAS), lo que demuestra un progreso significativo hacia una gestión más coordinada y eficiente, así como un renovado compromiso con los principios de responsabilidad y transparencia.
